Otras clínicas

Estamos hartos de buena arquitectura, saciados de espacios sobrecogedores, borrachos de edificios con personalidad, cansados de la escala humana, hastiados de recorridos sugerentes. Tenemos colmadas nuestra inquietudes artísticas y satisfechas todas nuestras necesidades vitales. Lleno el depósito de los deseos y las realidades. Nos inundan la belleza, la paz y el gozo. Está claro que hablamos de un escenario utópico, pero es por el que hay que luchar.